Corro a ti para que me escondas

¿Ante mis enemigos, a quién voy y para qué voy?

Corro a mi Dios para que me esconda: “Aureliano llegó cansado, y dijo como acongojado: “Tengo muchos enemigos en el trabajo, me hacen bullying sólo porque soy cristiano. De ellos estoy muy cansado, no sé cómo voy a salir de ese maíz picado”—se expresó con sinceridad. Su maestro, el sabio Gaudencio le dijo ahí nomás: “Corre hacia tu Padre celestial, y dile que te libre de todo ese mal. En serio, no es broma: corre hacia Él y pídele que de tus enemigos te esconda” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Corro hacia Dios para que me esconda veloz”; 13-08-2020.

¿Recuerdan qué hacíamos cuando había algún peligro, o teníamos temor y éramos niños? ¿Sí? Nos íbamos corriendo donde nuestro padre o nuestra madre y nos refugiábamos detrás de ellos o en sus regazos. Ahí encontrábamos un refugio seguro. Pues a eso mismo nos invita el Señor. Cuando nos sintamos acosados, pidámosle que nos rescate de nuestros enemigos, pero también vayamos corriendo hacia Él para que nos esconda. “Rescátame de mis enemigos, Señor; corro a ti para que me escondas.” Sal.143:9 NTV.

Padre, te busco siempre, y más cuando estoy acosado por aquellos que buscan mi mal. Tengo pues un Escondedero y uno que me protege siempre: Tú mi Rey, corro hacia Ti en esos momentos a esconderme en Ti, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.