¿Quién va a
aprehender al impío?
Sus propias iniquidades: “El testimonio de Aurelio, dejó a muchos perplejos: “Conocí a un tipo que en realidad era como proscrito. Hacía el mal por doquier y a quien fuera, no más por puro placer. Se le escabullía a la policía y a pesar que tenía muchas denuncias, al venirme yo, no lo habían aprehendido aún. Él dice que de la justicia se burla”—así narró su historia. Su maestro, el sabio Gaudencio le dijo con voz notoria: “No necesita a la justicia ni a la policía para que sea atrapado por sus desmadres, lo prenderán sus propias iniquidades” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Es una verdad: Te aprisiona tu propia iniquidad”; 22-04-20121.
La práctica consciente del pecado y de la maldad, trae como consecuencia la gestación de trampas inherentes en la misma marcha de la consumación del mismo. Y luego en un momento, el impío quedará atado, retenido o paralizado en la esencia misma de su maldad. Ahí será destruido. Por ello debemos de cuidarnos para no hacer del mal una constante consciente. “Prenderán al impío sus propias iniquidades, Y retenido será con las cuerdas de su pecado.” Pr.5:22.
Padre,
jamás permitas que mi corazón y mis deseos se desvíen hacia la práctica consciente
y constante del pecado, de la iniquidad, lo cual aborreces. Guárdame de hacer el mal Señor y tu
misericordia me rodee como escudo siempre, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano
y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.
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