¿Qué no digan nunca nuestros enemigos?

Le hemos devorado: “Tampoco han de imaginarse o decir nuestros enemigos, Ea le hemos devorado porque nos lo hemos engullido. Pues, aunque aparentemente puedan ellos tener una ventaja con clara victoria, ésta no vendrá jamás pues tendrán una asegurada derrota.”—descubrió Laurencio con el corazón latiendo. Su maestro, el sabio Gaudencio, le comunicó sonriendo: “Te mantiene siempre tu fe, tu disposición de que con Jesucristo, siempre puedes vencer.” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “No digan le hemos ganado, pues no podrán derrotarnos”; 19-07-2025. 

Los enemigos de Dios y los nuestros, quedan siempre estupefactos cuando creyendo que ya nos han devorado, piensan o gritan que ya nos han ganado. Y eso jamás pasa ni nunca sucederá. Con Jesucristo quedaron anquilosados cuando supieron que matarlo no pudieron. Hay tantas y tantas historias en la Biblia, donde pensaron que ganaban y la derrota eminente les llegó de súbito. “No digan en su corazón: ¡Ea, alma nuestra! No digan: ¡Le hemos devorado!” Sal.35:25.

Padre, jamás permitas que nuestros enemigos puedan anhelar en su corazón y decir: “lo hemos vencido”; porque sé que Tú nunca esa victoria a ellos se las darás. Lo he visto una vez tras vez. Y sé que contigo como con tu Hijo y tu Santo Espíritu, conmigo volvemos a vencer. En el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.