¿Para qué
regresamos al hogar?
Para bendecir a
nuestra familia: “La
pregunta fue para el joven discípulo del maestro: “¿Dónde vas Eustaquio, no vas
a disfrutar con nosotros este especial momento?”—le requirió Aureliano. Eustaquio
dijo no con la cabeza, y expresó con toda certeza: “Tengo que estar en mi casa
sin faltar, soy el sacerdote de la misma, por tanto tengo que bendecir a mi
hogar” Cuentos del Reino; Daniel Aragón;
“Tienes que bendecir a tu hogar sin faltar”; 30-04-2020.
Debemos
saber que nuestra casa, es el lugar donde siempre vamos a regresar y que debe
de ser bendecida por nosotros, los esposos. Nunca debemos olvidar que como
sacerdotes de nuestra familia, ésta cada día debe de ser por nosotros bendecida.
Y aunque ministremos en la Iglesia, es nuestro hogar el primer lugar que
debemos de bendecir y ministrar: “Luego
todos regresaron a su casa, y David volvió a su hogar para bendecir a su propia
familia.” 1Cr.16:43 NTV.
Padre,
bendigo a cada miembro de mi familia cada día en oración contigo; esta familia Señor es tu familia, y sé que
está por Ti muy bendecida, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo
Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.
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