Nada que se pueda desear es comparable a ella: “La pregunta de Eulalio vino de pronto de sus labios: “Esa enseñanza que da la sabiduría, ¿a qué valor se puede comparar en esta vida?”—inquirió con rapidez. Su maestro, el sabio Gaudencio le contestó de una vez: “Los diamantes valen mucho, los rubíes, esmeraldas o clinohumita. Pues nada de eso es comparable a la sabiduría, ni siquiera la amatista.” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “La sabiduría no se compara en valor con nada”; 17-10-2021.
Si tenemos alguna conciencia de lo que puede ser la riqueza más cuantiosa, aún esa cantidad si la doblamos o la triplicamos no podrá compararse al valor de la Sabiduría. Todo cuanto se pueda desear, la sabiduría lo supera en mucho más. Qué importante pues es adquirir esa enseñanza que ella nos puede dar, para llegar a obtenerla. “Porque mejor es la sabiduría que las piedras preciosas; Y todo cuanto se puede desear, no es de compararse con ella.” Pr.8:11.
Padre, dame de esa Sabiduría que Tú tienes para nosotros, porque ciertamente no sólo es más valiosa que el oro refinado, los diamantes y resto de piedras preciosas: Es más valiosa que todo cuanto yo pudiera desear. Por ello mejor, la obtengo a ella; en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.
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