¿Para quién es la vara?

Para la espalda del falto de cordura: “Recuerdo—comentó Eustorgia—cuando pequeña jugaba con mi prima Eustosia. Nos fuimos a cortar mangos a una finca vecina y esa fruta melosa, fue una delicia a nuestro paladar porque madura estaba por todo el lugar. Nos sorprendió el ocaso, y al regresar nuestras madres nos tomaron. Yo dije la verdad, mas mi prima mintió una barbaridad. A ella la castigaron, a mí sólo me regañaron”—finalizó la historia. Su maestro, el sabio Gaudencio le dijo con euforia: “El prudente de labios es sabio, pero el que engaña con su lengua sufrirá la afrenta”; Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “El prudente de labios es sabio”; 16-11-2021.

La prudencia en el hablar es saber callar cuando debamos hacerlo, hablar con verdad y ser amable y sincero. Pero hay personas que les gusta hablar hasta por los codos, y en la mucha palabrería se descubrirá algo errado. El castigo no esperará, y ya sea represión, faja, golpe o pérdida de la oportunidad, está vendrá. “En los labios del prudente se halla sabiduría; Mas la vara es para las espaldas del falto de cordura.” Pr.10:13.

Padre, que la prudencia siempre esté en mis labios para poder llegar a ser sabio y darte gloria a Ti amado Dios, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.