¿Quién hallará mayor gracia que el que lisonjea?

El que al hombre reprende: “Llegó Laurentino donde Venustiano a pedirle opinión sobre una determinación. Laurentino era ahora el nuevo líder de la empresa e iba a tomar una importante decisión. Venustiano lo halagó, sólo de él maravillas le habló. Le dijo que no importaba lo que decidiera, definitivamente él un hombre extraordinario era. Casi decidió Laurentino con la respuesta de Venustiano, pero tuvo el valor de dirigirse a Eustaquio. Este, hombre sabio, le dijo: “No Laurentino, sería un error de tu parte si eso haces. Porque lo harás sólo para que los demás sepan que haces cosas diferentes. Esto, a la empresa hará caer estrepitosamente. Actuarías tontamente”—le finalizó la exhortación. A final Laurentino hizo caso de Eustaquio y lo puso como su segundo”—comentó Eulogia emocionada. Su maestro, el sabio Gaudencio le dijo de volada: “El que al hombre exhorta, halla mayor gracia que el que halaga de sobra” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “El que guía con sabias palabras, tiene mayor gracia que el halaga”; 02-05-2023.

Una persona que no te adula, sino por el contrario con un buen consejo te ayuda, es mucho más importante para nosotros, que aquella que gasta mucha saliva en decir de ti, sólo cosas lindas. Las personas que te viven lisonjeando, son aquellas que quieren lograr de ti algo. Te inflan el ego sólo para hacer posible lograr sus propósitos. De ellas hay que cuidarse siempre.  “El que reprende al hombre, hallará después mayor gracia Que el que lisonjea con la lengua.” Pr-28:23.

Padre, que mi actitud sea perennemente amable con todos, pero cuando tenga que decir algo, sea para edificación de la persona. Si he de dar una buena opinión, darla, sin caer en el agasajo, para tu gloria y mi bien, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.