¿Quién se apresura a ser rico?

El avaro: “Eutrapio quería ser muy rico, por eso era sumamente avaro. A todos sus empleados le pagaba el mínimo, jamás dejaba propina y cuando utilizaba algún producto del hogar o para las maquinarias, daba poquísimo. Veía a diario aumentar su capital y se regodeaba con lo que tenía en el banco, pero por ahorrase un dinero, a sus cuentas nunca le puso seguro. De un día para otro le hackearon las cuentas, quedó sin nada, en la extrema pobreza”—contó Aureliano como ejemplo para no ser un avaro. Su maestro, el sabio Gaudencio le expresó sin preámbulo: “Quiere ser rico el avaro con certeza, no sabe que le cobijará la pobreza”. Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “El avaro quiere ser rico con presteza, más no sabe que quedará en pobreza”; 30-04-2023.

Los avarientos son personas codiciosas que buscan tener riquezas a toda costa. Para ello serán tacaños todo el tiempo, porque en su loca mente, piensan que si se ahorran un centavo, tendrán un centavo más en sus arcas. Explotan a las personas, pagan mucho menos, compran lo más barato posible y trabajando así viven. No tienen vida propia, posiblemente ni familia y si la llegan a tener, la mantienen como pobre. Por eso la pobreza les alcanza y los dejan sin nada. “Se apresura a ser rico el avaro, Y no sabe que le ha de venir pobreza.” Pr.28:22.

Padre, el ahorrar y ser mesurado en el gasto siempre es bueno, pero de eso a ser avaro hay un paso gigantesco. Que jamás tienda a ser tacaño y por el contrario, que mi mano sirva para ser de gran bendición. Para tu gloria y mi bien, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.