¿Qué digo cuando a Dios confieso mi mal?

Lo confieso y callo: “Cuando yo he sido la que fallo, enmudezco no abro mi boca, simplemente callo. Porque sé que lo terrible que estoy viviendo, es porque así lo quiere el Dios de mi sustento.”—confirmó Eudocia. Su maestro, el sabio Gaudencio, le dijo con voz parsimoniosa: “Es mejor callar ante Jehová, mas sabiendo que hemos hecho mal.” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Enmudezco ante Ti y no abro mi boca”; 30-09-2025.

¿Qué puedo decirle al Señor cuando yo he sido el culpable de mi situación? ¿Me justificaré ante mi Dios? No, lo mejor que puedo hacer es confesar mi maldad, pedir perdón y quedarme callado. Quizás decirle que en esa angustiosa situación sólo en Él he estado esperando. “Enmudecí, no abrí mi boca, Porque tú lo hiciste.” Sal.39:9.

Padre, enmudeceré ante Ti y tan sólo suplicaré tu misericordia Señor. No me quejaré de mi terrible situación y por el contrario, veré tu bondad sobre mí. En el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.