¿Qué le agradó al
Señor?
El hacer la voluntad de Dios: “Fue el único ser humano perfecto, pues todo lo que hizo durante su vida terrenal: hacer la voluntad de Jehová. Su ley estaba grabada con letras de oro en su corazón, porque Él mismo fue el autor.”—manifestó Eufrasio a su maestro, hablando acerca de este verso. Su maestro, el sabio Gaudencio, le expresó manifiesto: “Hermosa herencia que a nosotros nos llega a través del tiempo: hacer la voluntad del Eterno.” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “El hacer tu voluntad me ha agrado Señor”; 14-10-2025.
Aquí se anuncia que Jesucristo, el Hijo de Dios, vino con agrado a realizar la voluntad de su Padre. No sólo cumplió con la ley de Dios en todo, para ser una persona perfecta, sin pecado, justa; sino, que también cumplió con esa voluntad en obediencia hasta la muerte. Y no cualquier muerte, muerte de cruz. “El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado, Y tu ley está en medio de mi corazón.” Sal.40:8.
Padre, qué hermoso testimonio vivo del propio
Jesucristo, expresado en este verso profético que anuncia que hizo tu voluntad
con agrado: como Salvador,
como Redentor, como Sumo Sacerdote, como Rey y Heredero del Reino y de todo
poder. En Él nosotros te decimos: “El hacer tu voluntad me ha agradado”; en el
nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en Señor.