No escatimó ni a su propio HIjo para salvarnos

¿Qué nos dará el Padre a nosotros?

Todo lo que necesitemos: “Eulalio habló emocionado cómo había sido salvado: “Fue Eustaquio quien valientemente me rescató. Me sacó de lo profundo del mar donde me ahogaba yo. Vino por detrás de mí cuando ya no tenía esperanza, y tomándome por la espalda me habló y calmó. Me dijo que no necesitaba hacer nada, que tan sólo flotara y así hasta la costa a salvo me llevó.  ¡Y ahora aquí estoy!” La gente en el auditorio con gritos aplaudió. El maestro Gaudencio les dijo contento: “Hermosa analogía es esta para describir la salvación del Señor. Cuando ya no tienes esperanza, ahí está Él si tú lo llamas. Te salva y te lleva a lugar seguro y así de la muerte eterna te rescata”. Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Dios te dará todo, pues no escatimó nada para salvarte”; 19-07-2018.

Nuestra confianza en Dios está fundamentada en este hecho irrefutable: Para salvarnos, aún siendo pecadores, nos entregó a su propio Hijo para morir por nosotros. Y nos convirtió en sus hijos. Si eso hizo para poder tener la oportunidad de ser sus hijos, qué no hará para ayudarnos y salvarnos de todos nuestros problemas, pecados y daños. Lo único que tengo que hacer es confiar en Él porque le creo a Él. “El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?” Rom.8:32.

Padre, sé que no me has salvado para dejarme por ahí tirado, para de mí olvidarte. Me has salvado para darme lo mejor y formar en mí una nueva vida. Confío plenamente que tu Santo Espíritu me transforma hacia tu propia imagen en amor. En el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.