¿Qué trae al final el trabajar tanto?

Vanidad y aflicción: “Eustacio había toda su vida trabajado tanto. No hubo tiempo para otra cosa nada más que para el trabajo. Como profesional, había que hacerse de un nombre, una firma, un prestigio y eso era tiempo y saltar altibajos. Al fin había triunfado, era la más famosa y exitosa de su ciudad su firma de abogados. Y ese día que se sintió que a la cúspide del éxito había llegado, de la muerte de su hijo le informaron. Había tenido terrible accidente drogado. Dicen que desde ese día aborreció todo su trabajo”—narró Eulogia aún conmovida. Su maestro, el sabio Gaudencio le dio esta palabra de vida: “El trabajo, el prestigio; incluso la sabiduría sin Dios, la fama: es como retama que se la lleva el viento y la mueve cual flama” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Sin propósito del Reino; tu trabajo será como retama al viento”; 11-07-2023.

El sabio podrá edificar y construir algo realmente grande: Propiedades y empresas, negocios o ciudades; ganaderías y edificios de rentas, etc., etc. Esto le puede tomar mucho tiempo, disposición, planificación, ejecución, progreso. Y puede ver luego lo grandioso de su trabajo, pero cuando se da cuenta que no tiene alguien como él para mantenerlo o hacerlo crecer, se frustra y afecta. Generalmente sólo tendrá consumidores y destructores de lo que él ha edificado sin provecho. “Asimismo aborrecí todo mi trabajo que había hecho debajo del sol, el cual tendré que dejar a otro que vendrá después de mí. Y ¿quién sabe si será sabio o necio el que se enseñoreará de todo mi trabajo en que yo me afané y en que ocupé debajo del sol mi sabiduría? Esto también es vanidad.” Ecl.2:18-19.

Padre todo lo que en Ti hacemos trae provecho y además repercute en las vidas e instituciones que tocamos con tu Palabra, enseñanza y expansión de tu Reino; esto nos trae utilidad y nos alegra el corazón; en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.