¿Qué pasa cuando
muere el impío?
Perece su esperanza: “Fue Aureliano quien hizo este comentario: “Es el padre de un amigo, sabemos que de Dios es un enemigo. Ha sido un malvado y a mi amigo ha traumado. Está enfermo, grave y solo; mi amigo quiere que de Dios le hable, quiere que en una visita a él, yo le acompañe”—se expresó con cierto enojo. Su maestro, el sabio Gaudencio le dijo con arrojo: “Llénate de amor y templanza, ¿sabes que si este hombre muere se pierde sobre él toda esperanza?” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “No hay varianza, si el impío muere sin Cristo, se pierde toda esperanza”; 11-12-21.
Mientras hay vida en alguien, hay esperanza que pueda recibir a Jesucristo como su Señor y Salvador. No se trata de escoger a qué malvado (a) pasarle el mensaje, o a quién no. Porque ciertamente sin Cristo todo somos enemigos de Dios, porque somos malos de corazón. Por tanto, mi deber como cristiano es hablarle de la misericordia y perdón de Dios por medio de Cristo el Señor. “Cuando muere el hombre impío, perece su esperanza; Y la expectación de los malos perecerá.” Pr.11:7.
Padre,
que siempre mi corazón esté dispuesto a pasarle el mensaje a quien necesite de
Ti, o sea a todos los que están sin Ti. No
vea ni juzgue su condición moral, o su nivel de maldad. Dame pues un corazón como
el tuyo para hablarle de tu plan de salvación y restauración. En el nombre de
Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.
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