¿De quién es la esposa?

De su amado: “Eutropia confesó esto con alegre gesto: “Yo soy totalmente de Eutrapio, mi esposo amado. Todo mi ser le pertenece a él. Y por el amor que por él siento: como lo miro, como le sonrío, como le hablo, como en todo le atiendo.  Él conmigo tiene pleno contentamiento.”—dijo la joven contenta. Su maestro, el sabio Gaudencio, le dijo en forma amena: “Qué bueno que tengas, ese sentido de pertenencia.” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Tengo sentido de pertenencia al Señor”; 17-03-2024.

La Palabra de Dios me indica que yo le pertenezco al Señor por una buena razón: Fui rescatado, comprado, por el precio del amor al dar su vida y su sangre mi amado Salvador (1P.1:18-19; 1Cor.6:20). Esto hizo que fuere de Él para siempre. Y al conocerle ya más íntimamente, comprendo el amor por mí y por ti, Dios ha desbordado por los tiempos para tenernos con Él. Yo soy de Él. “Yo soy de mi amado, Y conmigo tiene su contentamiento.” Cnt.7:10.

Padre, tuyo soy por el precio de rescate, tuyo soy porque eres mi Creador, tuyo soy porque tu hijo soy. Tuyo soy por tu amor. Porque Tú me amaste primero y te dispusiste a dar la vida de tu Hijo, tu Hijo a dar la vida por mí, para tenerme en Ti, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.