¿En quién he de refugiarme para no ser avergonzado?

En Jehová: “Es testimonio de Aureliano sonaba como un poco desesperado: “Acepté el reto del debate de manera seria, para demostrar a los ateos que en realidad ellos creen en su dios materia. Que al practicar sus principios filosóficos con pasión, practican en sí una religión. Mas sólo pido al Señor amado, no ser yo avergonzado”—expresó con determinación.  Su maestro, el sabio Gaudencio le dijo con emoción: “A la verdad Aureliano, que tú no serás jamás avergonzado, porque en Jehová tu Dios te has refugiado” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Jamás seré avergonzado porque en Jehová mi Dios me he refugiado”; 11-05-2021. 

Cuando hemos aprendido a refugiarnos en nuestro propio Padre, como cuando un niño viendo el peligro corre hacia los brazos de su progenitor; tenemos y gozamos de su protección, amor y provisión. Él tiene cuidado de nosotros y como buen Padre no permite jamás que a un (a) hijo (a) suyo (a), lo quieran avergonzar de la forma que sea. Jamás lo permitirá de la misma manera que tú o yo no permitiremos que eso pase con un (a) hijo (a) nuestro (a). “En ti, oh Jehová, me he refugiado; no sea yo avergonzado jamás” Sal.71:1.

En Ti he confiado Padre mío, no permitas que sea avergonzado jamás por aquellos que buscan mi mal. Confúndelos y avergüénzalos Tú Padre mío, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.