Otro abismo: “Habló con el corazón Eustaquio, esto fue lo que dijo el muchacho: “En lo profundo inspeccionando he andado a mi alma, ahí me di cuenta de qué adolezco, hice inventario de todos mis defectos. ¿Qué fue lo único que refrescó mi alma? Oh Señor, la voz de tus cascadas”—confesó con pasión. Su maestro, el sabio Gaudencio le dijo en alta voz: Ahora, un abismo puede llamar a otro abismo para que sea sanado, en el nombre del Señor Jesucristo” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Un abismo llama a otro abismo a sanarse con Jesucristo”; 25-05-2021.
Sondear con la honestidad y la verdad el abismo de nuestra alma, no es tarea fácil. Implica reconocerse débil, defectuoso, adolorido y afectado. Necesita rendirse ante Dios y mostrar el abismo de la profundidad de nuestro interior. Luego viene el Señor y nos da su Palabra, la que viene a ser como una hermosa cascada que trae gozo y alegría. Pero, sólo quien ha experimentado esto, es capaz de comunicarse con otro abismo, seco y vacío. Para dar esa voz de Jesucristo: Su Palabra: Una fuente de agua viva, una hermosa cascada. “Un abismo llama a otro a la voz de tus cascadas; Todas tus ondas y tus olas han pasado sobre mí.” Sal.42:7
Padre,
para implementar la sanidad interior a otros, estoy listo. Como abismo puede
llamar a otro abismo a la voz de tus cascadas. Tus ondas y olas me han bañado y me he refrescado y sanado en tu
Palabra: en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón, Feliz
día en el Señor.
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