¿Con nuestro Dios
cómo será mi enseñanza?
Goteará como la
lluvia: “La
pregunta fue para el maestro Gaudencio: “Maestro, ya entró usted a la tercera
edad, ¿a qué edad dejará usted de enseñar?—inquirió honestamente Orquídea. Él
le dijo sin prisas: “Dejaré de enseñar cuando mi Dios deje de enseñarme. Y no
es para vanagloriarme, pero su enseñanza me viene como las gotas de lluvia
cuando fuerte llueve, y su razonamiento como lleva el rocío cada mañana el
viento” Cuentos del Reino; Daniel
Aragón; “Como gotas de lluvia tu enseñanza”; 26-04-2019.
En
Cristo todos somos discípulos, por tanto lo que hemos sido llamados para
enseñar es porque Él nos ha ordenado mostrar, lo que Él nos ha enseñado. Y en
esto estoy fascinado, porque su enseñanza es diaria y cae como las gotas de
lluvia nos caen en el rostro cuando nos mojamos bajo la lluvia. Su sabiduría,
su razonamiento, como el rocío de la mañana, como la llovizna cae sobre la
grama. “Goteará como la lluvia mi
enseñanza; Destilará como el rocío mi razonamiento; Como la llovizna sobre la
grama, Y como las gotas sobre la hierba;” Dt.32:2.
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