¿Cómo debemos de tener las leyes del Señor?

Como el deleite de nuestro corazón: “Fue Aurelio quien preguntó esto: “No entiendo, no entiendo. Si con el nuevo Pacto quedan abolidas las leyes para nosotros, porque dice Eustaquio que obedecerlas para él es su tesoro?”—inquirió con voluntad. Su maestro, el sabio Gaudencio le dijo con tranquilidad: “Porque son las llaves que los cristianos usamos, para vencer y triunfar sobre este mundo dañado. Ellas valen más que el oro, obedecerlas y aplicarlas te dan más ganancia que un tesoro” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Tus leyes, aplicarlas, son mi deleite”. 14-11-2020. 

No se trata de obtener la salvación porque cumplimos las leyes de Dios. La salvación es por gracia, no es por obras. La ley no tiene vigencia sobre nosotros porque la sangre de Jesús nos ha santificado y justificado delante de Dios. Sin embargo, para poder vencer sobre este mundo afectado, es necesario aplicar la ley de Dios en todos nuestros asuntos, entonces podremos ver el poder que ella tiene y cómo obtenemos resultados de vida. Por eso deben de ser el deleite de nuestro corazón y nuestro mayor tesoro. “Tus leyes son mi tesoro; son el deleite de mi corazón. Estoy decidido a obedecer tus decretos hasta el final.” Sal.119:111-112 NTV.

Padre, qué precioso es tener ese sentimiento y conocimiento de querer cumplir con tus decretos y leyes, hacerlos nuestro tesoro. Cuando experimento el beneficio de esto quiero obedecerlas y cumplirlas siempre en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.