Agradecidos en todo

¿Cómo debe de ser nuestro corazón?

Agradecidos en todo para con los demás y el Señor: “Me esfuerzo por aferrarme a la verdad de que un corazón lleno y agradecido no puede abrigar grandes presunciones.  Rebosante de gratitud, el corazón tiene que latir con un amor que fluye hacia todo lo que nos rodea, la emoción más elevada que jamás podamos experimentar.”  Bill Wilson; “Como lo ve Bill”, pág. 37.

El estar agradecido en todo, es un culto de acción de gracias a Dios de manera constante. Es una experiencia de gozo diario.  Es alegría, es fe, es amor por la vida.  ¿Dimos gracias por el día de hoy?  ¿Dimos gracias por nuestra familia, por nuestra salud, por nuestra vida?  ¿Dimos gracia por nuestra ropa, por nuestra comida, por el trabajo, por nuestros hijos, por nuestra esposa, por nuestros amigos, por nuestra comunidad y vecinos? Puedes decirme que quizás en este momento no tengas algunas de estas cosas o personas, sin embargo, te digo: ¿dimos gracias porque un día las tuvimos? Decía Facundo Cabral que de la cuna a la tumba todo es una enseñanza. ¿Aprendí algo hoy? Por eso, también debo de dar gracias a Dios. “Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.” 1Tes.5:18.

Padre, muchas gracias porque vimos el sol salir hoy; gracias por tu amor, misericordia, guía y enseñanza.  Gracias por tu persona amada.  Gracias por mi familia, por mis amigos, por mis compañeros de trabajo, por todo y cada una de las personas y cosas que me has dado, en el nombre de Jesús, amén.  Tu hermano y amigo Daniel Aragón,  feliz día en el Señor.