¿Qué soy en las manos de Dios?

Su obra maestra: “Fue Eustorgia la que contó su historia: “Vivía una vida sin propósito, afectada y de por sí desenfrenada. Hasta que un día llena de dolor, el Señor me quebrantó y luego sentí que en otra persona me convirtió”—con cierto gozo testificó ante su maestro y sus compañeros. El sabio Gaudencio le dijo sincero: “No quería tener esa vasija que eras, por eso te quebrantó y una vasija mejor realizó con vos” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Vasija nueva de honra te hace el Señor”; 09-03-2021.

Qué importante es saber que Dios nos va a preparar como alfarero, para sus propósitos de honra. Cuando nos hace el llamado, no importa si podemos considerar que no estamos preparados, porque Él nos va a moldear en un proceso. A un escultor le preguntaron cómo esculpía y él dijo: “Primero veo digamos a un hombre laborando con ahínco, esto lo veo en la piedra. Luego tomo el cincel y el mazo y quito todo lo que no sea el hombre trabajando con ahínco”. Así es nuestro Padre, mira en nosotros lo que vamos a hacer y quita todo lo que nos estorba. “Y la vasija de barro que él hacía se echó a perder en su mano; y volvió y la hizo otra vasija, según le pareció mejor hacerla.” Jer.18:4.

Padre, sé que si no te gusta algo de mi ser, lo quebrantas primero y luego lo vuelves a hacer en mí, hasta lograr la obra perfecta que soy para Ti. Gracias porque hacia la perfección me llevas para tu gloria, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.