viernes, 17 de abril de 2020

Pero los sabios calladamente lo controlan.

¿Qué hacen los sabios con la ira?
Calladamente la controlan: “Aurelio parecía energúmeno, estaba enojado hasta lo sumo: “Le dije a mi hermano Eulalio que no me ofendiera tanto. Pero él no me hizo caso, así que me fue enojando y enojando, hasta que le arrojé un silletazo, le di soberano guasmirulazo.”—se expresó así el joven poniendo expresiones de enojo. Su maestro, el sabio Gaudencio lo calmó y le dijo esto con mucho modo: “Aurelio, los necios dan rienda suelta a su enojo. Pero los sabios en silencio, controlan su enojado temperamento” Cuentos del Reino, “En silencio controla tu temperamento”; 16-04-2020.

La ira se enciende en un momento en nosotros; y lo peor, es que muchas veces nos auto autorizamos al considerarla muchas veces como justificable. Me enojé porque aquel me ofendió, o quizás porque me contradecía, o simplemente no dejaba que actuara o hablara, o bien me enojé porque no me caía bien y hasta porque no me gustaba lo que hablaba. Sin embargo, los sabios calladamente controlan su enojo.  Lo hacen en silencio porque así se ven restringidos a no contestar las ofensas o la contradicción, o aquello que dijo que no me gustó. “Los necios dan rienda suelta a su enojo, pero los sabios calladamente lo controlan.” Pr.29:11 NTV.

Padre, el control de mi enojo es algo que sólo Tú puedes ayudarme a ponerlo en práctica. Lo primero, ayúdame a no contestar y segundo a calmarme para poder bendecir cuando vaya a hablar en respuesta a lo que sea, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.

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