Llamados a seguirle

Para qué fuimos llamados?

Para servir a los demás con todas sus consecuencias: “Ningún caso debe parecerte demasiado lastimoso, ninguna tarea demasiado dura, ningún esfuerzo demasiado grande. Debe ser usado con tolerancia, porque no he limitado su aplicación a ninguna raza, credo o secta. Puedes esperar la crítica personal, la cual será corriente por falta de apreciación; ridiculizada será tu suerte, tus motivos mal juzgados. Debes estar preparado para la adversidad, porque lo que los hombres llamen adversidad, es para ti la escalera que debes usar para ascender los peldaños hacia la perfección espiritual. Recuerda que en el ejercicio de este poder no te exigiré más allá de tus fuerzas.”  AA.HIVOC.co; “La razón por la cual fuiste escogido”

Cuando procedemos a servir en aquellas tareas que Dios nos ha preparado de antemano para que anduviésemos en ellas, puede parecernos un trabajo demasiado duro, muy sacrificado y quizás demasiado comprometido. Es ahí, cuando nos entregamos todo, en lo que el Señor nos envía a hacer, cuando recibimos de Él las enseñanzas, revelaciones o bien la sabiduría que nos hace crecer espiritualmente. Se trata de seguirle a Él, siendo capaz de dejarlo todo.  “Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas;” 1P.2:21.

Padre, hemos sido llamados para servir, para aprender a dejarlo todo por Ti.  Cuando realizamos esto, crecemos y somos perfeccionados en tu amor.  Que siempre tenga esa disposición en mi corazón. En el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.