Un instrumento
útil para honra: “Aurelio
llegó corriendo, quería que el maestro le diera un consejo: “¿Cómo podré ser
usado por Dios y convertirme en un instrumento de su amor?”—le preguntó aún
jadeando el muchacho. Su maestro le contestó mientras lo seguía observando: “Debes
quitarte de ti lo que te esté estorbando, lo que quiera frenarte para que
puedas servirle al Señor con todo entusiasmo. En esto requieres la ayuda del
mismo Dios, así que pídele te muestre lo que pueda detenerte y una vez hecho
esto, instrumento de honra serás para su gloria”. Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Instrumento santificado al Señor”;
10-03-2019.
No
es fácil poder limpiarse de todo aquello que estorba al llamado de Dios:
vanidades, egoísmo, otros planes, terquedad, etc.; son elementos que pueden
afectar poder convertirse en un instrumento de honra para Dios. Pero, cuando se
logra, qué bendición saberse un instrumento santificado y útil para el Señor,
que está dispuesto a realizar toda buena obra. “Así que, si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para
honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra.” 2Tim.2:21.
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