¿Qué no debemos
hacer ni ser?
Mucho mal y tampoco ser insensato: “Maestro, escogí desde temprano el bacanal de lleno, además de elegir una vida que jamás tuvo un fin. No había metas, dirección, sólo adrenalina y mucha acción. Hasta que me estrellé contra mi propio muro de dolor, pude ver todo mi mundo de destrucción”—confesó Tertuliano con sinceridad. Su maestro, el sabio Gaudencio le habló con verdad: “¿Por qué al escoger la extrema maldad o la exagerada insensatez, tengamos que perecer? ¿Por qué escoges antes de tu tiempo el fallecer? Debes pues en ello reflexionar: ¿qué cargas por dentro, que te hace hacerte tanto mal?” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “¿Qué daño nos hemos hecho, que sólo el hacernos mal escogemos?"; 27-09-2023.
Si bien no debemos de ser demasiados justos ni demasiados sabios: tampoco hemos de ser inmoderadamente malos e inmoderadamente insensatos. Ambos extremos nos llevan o a caer mal a los demás porque nos envanecemos en nuestra “justicia” y “sabiduría”; o a perecer temprano por los efectos de practicar la maldad y la extrema insensatez. Reflexionemos. Ciertamente el que teme a Dios, si nos fijamos muy bien: en todo sale bien. Escojamos pues a Jehová temer. “No hagas mucho mal, ni seas insensato; ¿por qué habrás de morir antes de tu tiempo? Bueno es que tomes esto, y también de aquello no apartes tu mano; porque aquel que a Dios teme, saldrá bien en todo.” Ecl.7:17-18.
Padre,
que tu temor esté en mí siempre; porque con este temor no me llegaré a
envanecer, sintiéndome mejor que los demás porque tu justicia practico y su
sabiduría persigo. Por otro lado me hace
apartar de todo mal y me da prudencia y buen juicio, para la insensatez evitar.
Contigo: todo me sale bien. En el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo
Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.