Demasiada actividad y demasiadas palabras: “Aureliano fue quien preguntó y lo hizo bien determinado: “Dígame dos cosas que no le agradan a Dios, pues demuestran poca fe en el servicio que vos a Él le hacés”—fue su solicitud. Su maestro, el sabio Gaudencio le dijo con prontitud: “Que te preocupes por lo que vas a hacer y que presentes demasiadas palabras en aquello que ocupa mucho menos habla” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Actividad y palabras, que nunca estén demás”; 12-07-2020.
Muchas personas realizan demasiadas actividades sólo para demostrar que ellos están sirviendo. Hacer demasiadas cosas es como preocuparse de que puedes perder lo que tienes. Esto es inseguridad. Al igual decir demasiadas palabras, aún para defender un argumento o ideología, resulta en estos casos vanos y te pueden hacer ver necio. Hacer las cosas como se deben y hablar lo necesario, esto es de sabios. “Demasiada actividad trae pesadillas; demasiadas palabras te hacen necio.” Ecl.5:3 NTV.
Padre, ayúdame a encontrar siempre ese equilibrio necesario para hacer las cosas que debo de hacer sin preocuparme demasiado, y de decir las cantidades de palabras precisas para darme a comprender, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.
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