¿Qué no debemos de menospreciar?

El castigo de Jehová: “Eulogia preguntó a su apreciado mentor: “Maestro, dígame si estoy en lo cierto o sólo es un yerro continuo: ¿Existe lo que la gente llama castigo divino?”—inquirió con buen argumento. Su maestro, el sabio Gaudencio le dijo contento: “Para los hijos no hay tal castigo de acuerdo a lo que ellos creen es el tal castigo. Nuestro Padre usa en nosotros la corrección. Su castigo es correctivo, es un escarmiento lleno de amor.” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “El castigo del Señor es corrección”; 02-09-2021.

Es posible que como hijos podamos llegar a cansarnos de la disciplina y castigo que nos han infringido nuestros padres. De la misma manera llegamos a tener el atrevimiento de gritarle al cielo, donde pensamos está nuestro Padre, para reclamarle lo mal que nos puede ir. Pero, ese mal es consecuencia nuestra y además, Dios usa ese dolor para llevarnos hacia su corrección, su persona y su amor. “No menosprecies, hijo mío, el castigo de Jehová, Ni te fatigues de su corrección; Porque Jehová al que ama castiga, Como el padre al hijo a quien quiere.” Pr.3:11-12. 

Padre, perdón porque muchas veces te reclamé a Ti de las consecuencias de mis errores, y viví tu corrección que me llevó hacia Ti y tus propósitos de amor. Puedo ver claramente tu amor, y el hecho que aún me sigues perfeccionando para llegar un día a parecerme a Ti. Gracias, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.