¿Cómo estamos en
la casa de Dios?
Como olivo verde: “Aureliano llegó
entusiasmado, traía para compartir un salmo. Así que a su maestro preguntó: “¿Qué
significa que yo estoy como olivo verde en la casa de Dios?”—su maestro asintió
en silencio, y dijo sonriendo: “Es una hermosísima analogía que da gusto. Es un
árbol casi indestructible, produce mucho fruto; y el mismo sirve para la
cocina, la higiene, la cosmética, la iluminación y la medicina. El hecho que
esté verde significa que está en plenitud de producción; simboliza también la
misericordia de Dios y la resurrección” Cuentos
del Reino; Daniel Aragón; “Como olivo verde en la casa de Dios”; 09-06-2019.
No
se eleva hasta los cielos como los cedros del Líbano, su madera no es tan
preciada como la del Enebro, sus flores no son tan vistosas y coloridas como
las del almendro. La clave de este árbol está bajo tierra: tiene raíces que se
profundizan más de seis metros y a lo largo se extienden aún más. Es inamovible
y resistente a cualquier tormenta y aún más, sus raíces le permiten sobrevivir
a una sequía cuando muchos árboles del valle ya han muerto por falta de agua. Puedo
producir hasta 57 litros de aceite de Oliva durante el año, por siglos. Representa
una vida familiar feliz y la misericordia de Dios, es casi eterno. “Pero yo estoy como olivo verde en la casa
de Dios; En la misericordia de Dios confío eternamente y para siempre.”
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