¿Qué debemos hacer
con los trabajos que vinieron?
Hacerlos y
hacerlos bien: “Vea
amigo, he pensado en usted para que pueda hacerme este trabajito. Consiste en
una pequeña planta eléctrica, haciendo en mi casa una pequeña represa. Traigo los
planos: tuberías, paredes, cañerías, propelas, todo detallado.”—“me propuso don
Laurencio maestro, yo le dije que sí, pues sí que me aviento.”—contó a su
maestro, Gualterio, el prospecto a ingeniero. El sabio Gaudencio le dijo
sereno: “Escrito está que todo lo que a tu mano venga para hacer, hazlo ya. Según
tus fuerzas, tu inteligencia.” Cuentos
del Reino; Daniel Aragón; “Todo lo bueno que te venga para hacer, hazlo bien”;
27-10-2023.
Aquí
es donde vamos a poder desarrollar nuestros dones y talentos que Jehová Dios
nos ha dado a cada uno de nosotros. Aquí aplicamos obra, trabajo, ciencia y
sabiduría en cada una de las cosas que hagamos para la gloria de Dios. Ponemos por
ello todo nuestro esfuerzo, nuestro trabajo, nuestro talento en las manos del
Señor, para que lo que produzcan sea para glorificarlo. “Todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas;
porque en el Seol, adonde vas, no hay obra, ni trabajo, ni ciencia, ni
sabiduría.” Ecl.9:10.
Padre, todo cuanto hago y produzco, todo cuanto creo y origino, proviene de lo que Tú me has dado a mí Señor. Que sea para tu gloria y tu honra, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.