¿De qué no debemos
de sorprendernos?
De que no haya
justicia en la tierra: “Eulalio venía enojado, su gobierno lo tenía
frustrado: “No me gusta lo que hacen los que en este gobierno están arriba,
para mí es injusticia”—se expresó sulfurado. Su maestro el sabio Gaudencio le
dijo calmado: “No te sorprendas por las injusticias que los gobiernos expresan.
Son tantas las trabas, que la justicia se pierde entre tanta burocracia. No es
tampoco de sorprender que los propios líderes de gobierno saquen beneficios, al
ejercer su oficio” Cuentos del Reino;
Daniel Aragón; “Hay para el pueblo opresión e injusticias a montón”;
27-03-2020.
Los
que denunciaron anteriormente las injusticias, los que luchaban por los
oprimidos, ahora les toca a su gobierno ejercer esta opresión. Funcionario tras
funcionario, unos sujetos a otros en espiral se va diluyendo la justicia porque
se abandona la visión principal. Los primigenios ideales se pierden entre
trámite y trámite; hasta quedar tan solo el puesto para controlar y dominar. Y así
se repiten unos gobiernos y otros. Sólo con Cristo podrá haber un justo, eteno y
perfecto gobierno. “No te sorprendas si
ves que un poderoso oprime a un pobre o que no se hace justicia en toda la
tierra. Pues todo funcionario está bajo las órdenes de otro superior a él, y la
justicia se pierde entre trámites y burocracia. ¡Hasta el rey saca todo lo que puede de la
tierra para su propio beneficio” Ecl.5:8-9.
Padre,
me adviertes en estos versos que no me sorprenda, no me sofoque, no me ahogue
por la mala administración de un gobierno y su falta de justicia. Sé que siempre Tú estás en control, y que
al predicar tu Reino de amor, estoy sentando las bases de un gobierno justo y
eterno en Cristo Jesús, Señor nuestro. Amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón.
Feliz día en el Señor.
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