¿Qué tenemos que tener presente cuando estemos jóvenes y bien?

Que vendrán días duros después: “Maestro, maestro, ¿ha notado que cada día cuando amanece, usted puede ver el cielo y la luz del sol sin que esto le afecte? Es que la luz es suave y además agradable”—le comentó Eulampio a su maestro emocionado. El sabio Gaudencio le dijo muy calmado: “Así es Eulampio, pero cuando es medio día o a las dos, tres de la tarde, ya no puedes ver el sol sin que sientas en los ojos ardor” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “En tus día mozos todo es alborozo, pero tendremos días sin gozo”; 26-11-2023.

Así como la luz del amanecer es suave y agradable, pero poco a poco se torna imposible de verla sin recibir daño a los ojos; así también es la vida del hombre. En el amanecer de su vida todo es luz y color, puede trabajar fuertemente, puede incluso divertirse, comer hasta saciarse prácticamente sin consecuencias. Pero no siempre será así: no siempre será gozo; habrá momentos en que las fuerzas te abandonen y entonces, tendrás que tomar de lo que antes has ahorrado disciplinadamente para cuando lleguen los días malos. “Suave ciertamente es la luz, y agradable a los ojos ver el sol; pero aunque un hombre viva muchos años, y en todos ellos tenga gozo, acuérdese sin embargo que los días de las tinieblas serán muchos. Todo cuanto viene es vanidad.” Ecl.11:7-8.

Padre, qué tremenda lección nos das en estos versos amado Rey; permíteme siempre ahorrar para esos días de tinieblas que llegan en cada etapa, pero que en la vejez es mucho más. Fortaléceme en Ti, porque después de todo, mi retiro eres Tú. En el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.