Que demos gracias
en todo: “…Cuando
el gracias, que a veces puede tener destino: por algo que recibió, por algo que
le dieron, por algo que vivió. Pero cuando
el gracias es por existir solamente, cuando el gracias es por saberte un ser
dichoso por existir. Cuando el gracias
es por la existencia y aquel que nos la da.
Cuando el gracias es así. Siempre, cualquier realidad que tengas empieza
a cambiar…Hoy soy lo que soy porque aprendí a entender, que el agradecer es el
agrado de ser. El agradecer es el agrado
de ser. Entonces te invito, como me
invito todos los días, a que no dejes de decir muchas veces gracias. Encuentra los motivos, y cuando ya no
encuentres motivos para agradecer y sigues diciendo gracias, entendiste lo que
te digo. Ya no hay capacidad para
quejarse, ya no hay ganas de ver oscuridades…” Entrevista
a Dr. Roberto Pérez; Embajador de la paz.
Una
persona agradecida es una persona gozosa. Disfruta de la vida a diario y
fructifica cada día. Aprende todos los días algo. Ora, medita y reflexiona. Se da, comparte, bendice, produce, construye,
crece, fortalece y anima día a día. No
se cansa, no se envanece, no se irrita de la vida. Ama a Dios y se ama a sí mismo (a), por lo
tanto, puede amar a otros. Y como puede
amar siempre está agradecida, porque “el agradecer es el agrado de ser”. “Estad siempre gozosos. Orad sin cesar. Dad
gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo
Jesús.” 1Tes. 5:16-18.
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