viernes, 29 de diciembre de 2017

Él nos eligió para servir con amor

¿Quién y con qué propósito nos eligió para servir?
El Señor, para llevar fruto permanente: “Decidir cuáles son las prioridades más altas, y tener el valor de decir “no” a otras cosas, con buena educación, sonriendo, y sin dar excusas. Y para hacerlo hay que tener un “si” más grande ardiendo dentro.” Stephen R. Covey; Los 7 hábitos de la gente eficaz, Paidós, Barcelona, 1992, p. 178.

Hay algo que arde dentro de nosotros con fuego de lo Alto.  Es el fuego del Espíritu Santo, fuego Santo para ofrecer esos sacrificios a Dios en el altar del corazón. Ahí atendemos ese llamado para servir, es más fuerte que nosotros, más importante que nuestra vocación, que nuestros dones, que nuestros intereses, que nuestras vidas incluso.  Ese es el fruto permanente, cuando las obras del Señor son hechas realidad para el servicio de los demás. “No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé.” Jn.15:16.

Padre, gracias porque Tú nos elegiste a nosotros.  No nosotros a Ti.  Eso nos da seguridad de que, si somos tus elegidos, desde antes de recibirte ya nos había escogidos como tus hijos.  Gracias Señor por este llamado, que siempre arda en nuestro corazón ese fuego del Espíritu Santo para servir en tus obras de amor, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario