sábado, 2 de diciembre de 2017

Un inventario de lo que en ti ha hecho el Señor

¿Qué nos anima el Señor?
A despojarnos del viejo hombre con sus hechos: “Es que es sencillo, a veces pienso que no he crecido.  De veras, continuamente me reviso, de manera interna lo hago.  ¿Y qué me he encontrado? Que aún cargo en mí muchos defectos”—dijo un poco angustiado el joven Eustaquio.  Su consejero y amigo, el sabio Gaudencio, así le dijo: “No te angusties por aquellos defectos que aún no te han dejado.  Alégrate por aquellos que ya de ti se alejaron.  Eso significa que tú en Dios vas enrumbado. Poco a poco vas avanzando.  Ya dejarás en su momento, todo lo demás”.  Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Dejando de una vez, un defecto a la vez”. 30-11-2017. 

Hay veces no entendemos, que Dios es quien trabaja en nosotros con nuestros defectos.  Todos queremos y anhelamos ser perfectos, pero nos encontramos con que aún estamos de ese estado lejos. Sin embargo, vamos caminando hacia ello.  Haz un inventario de tus antiguos defectos, crea una lista de lo que Dios te ha liberado; “Sí—diría Eustaquio—Dios me ha quitado estas adicciones: fumar, tomar, consumir drogas.  También el miedo, resentimiento, la modorra.  Qué decir de mis complejos: sentirme no amado, abandonado.  ¿Y qué otros pecados? Ser egocéntrico, libre de conflictos internos, de la procrastinación, del aburrimiento, de la soledad, de la envida y los celos.  Del yoquepierdismo y la inseguridad, de la falta de responsabilidad.  De fallar la provisión de mi hogar, de no servir a los demás.  Pero lo más importante, he comenzado a aprender a amar” ¿Ves? Eso es bastante. ¿Y tú? “Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas, de vuestra boca.  No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos” Col.3:8-9.

Padre, Tú te muestras en mí, en la labor que has hecho de irme liberando de cada uno de mis defectos.  Conmigo vas caminando y me vas enseñando.  Aún no soy perfecto, pero sé que de todos mis defectos liberado seré, por el poder que hay en Él; en Cristo Jesús, amén.  Tu hermano y amigo Daniel Aragón.  Feliz día en el Señor. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario