El bien a todos: “Aureliano
preguntó esto, al maestro Gaudencio: “Me dicen que soy salvo para hacer buenas
obras, pero: ¿A quién debo ayudar sino tengo dinero de sobra?”—inquirió casi
angustiado. Su maestro estuvo pensando un rato y luego le dijo a boca de jarro:
“Haz a todos el bien, pero sobre todo a la familia de la fe. Según Dios te dé
cómo ayudar, así debes tomar la oportunidad” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “A todos hagamos el bien, sobre todo
a la familia de la fe”. 07-05-2019.
Hacer
el bien a otra persona no necesariamente requiere de gastos económicos.
Preocuparme por sus sentimientos, conocer cuáles son sus esperanzas, enterarme
de sus tristezas, que conmigo comparta de sus alegrías y del alcance de sus
metas. Saber de sus penas, de sus temores, de sus fortalezas y ayudarlo en sus
debilidades, es un espacio enorme que se abre para ayudar a muchos. “Así que, según tengamos oportunidad,
hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe.” Gál.6:10.
Padre,
ayúdame y guíame según las obras que tienes preparadas para mí, para poder
ayudar a cuantas personas pueda. Que mi
interés sean los demás y su bienestar, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano
y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.
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