Creciendo en la obra del Señor siempre

¿Cómo debemos de estar en la obra del Señor?

Firmes, constantes y creciendo: “Aureliano venía cansado, por eso dijo un poco afectado: “Ya no, ya me cansé de hacer la obra del Señor. Lo mejor que puedo hacer es sólo adorar con cánticos y alabanzas a mi Dios.”—terminó de decir casi gritando en alta voz. Su maestro, el sabio Gaudencio le dijo con amor: “NO mi amado Aureliano, es todo lo contario. La palabra de Dios nos insta a que no nos cansemos de hacer la obra del Señor; nos dice además que debemos de crecer haciendo mucho más labor” Cuentos del Reino; Daniel Aragón; “Firmes y constantes, en la obra siempre adelante”; 29-11-2019.

En la labor que hacemos para el Señor podrá haber momentos duros y terribles. Auges y zozobras, cansancio y motivación, agotamiento y fortalecimiento, declinación y aumento. Cuando pasan los años, el querer rendirse suele ser una constante, pero Dios nos insta a que seamos firmes y si hay que ser constantes, es trabajar en su obra. Y la misma debe también crecer, pues el trabajo que hacemos no es en vano, tiene un peso eterno de gloria. “Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano.” 1Cor.15:58.

Padre, dame poder de tu Santo Espíritu para nunca declinar al llamado que me ha hecho tu hijo Amado. Que juntos, con los que trabajo para Ti, podamos seguir bregando y creciendo en la obra que tanto amamos, en el nombre de Jesús, amén. Tu hermano y amigo Daniel Aragón. Feliz día en el Señor.